En el mundo de la estética avanzada, uno de los grandes retos es tratar los signos del envejecimiento y las alteraciones cutáneas sin recurrir a intervenciones agresivas. En este contexto, la diatermia se ha posicionado como una de las tecnologías más eficaces y seguras para estimular la regeneración natural de los tejidos desde el interior, actuando en profundidad y mejorando notablemente la salud y apariencia de la piel.
La diatermia, también conocida como radiofrecuencia profunda o tecarterapia, es un tratamiento no invasivo que trabaja con corrientes de alta frecuencia para activar procesos biológicos internos, regenerar tejidos, estimular la producción de colágeno y mejorar la oxigenación celular. Su eficacia, versatilidad y efecto inmediato hacen de esta técnica una de las favoritas tanto en tratamientos faciales como corporales.
A continuación, te explicamos en profundidad qué es la diatermia, cómo funciona, qué beneficios ofrece, a quién está dirigida y por qué es uno de los pilares en la estética regenerativa moderna.
La diatermia estética es una tecnología que emplea corrientes eléctricas de alta frecuencia para generar un calor profundo controlado en los tejidos, sin dañar la superficie de la piel. Este calor provoca un efecto bioestimulante que activa la circulación sanguínea, mejora el drenaje linfático, estimula los fibroblastos (células responsables de la síntesis de colágeno y elastina) y acelera los procesos de reparación celular.
Existen dos tipos principales de diatermia:
Ambas modalidades pueden combinarse durante una misma sesión, según las necesidades de cada caso.
La diatermia genera un campo electromagnético que, al atravesar los tejidos, produce una fricción molecular controlada que genera calor interno. Esta elevación térmica estimula procesos fisiológicos naturales, como:
Todo esto se traduce en una mejora visible y palpable del estado general de la piel y del tejido subcutáneo.
La diatermia es una tecnología extremadamente versátil, indicada tanto para tratamientos faciales como corporales, y que puede aplicarse en personas jóvenes que desean prevenir el envejecimiento o en pieles maduras que buscan rejuvenecimiento profundo. Entre sus beneficios más destacados encontramos:
Estimula la producción natural de colágeno y elastina, lo que ayuda a atenuar arrugas, líneas de expresión y flacidez, dando un aspecto más firme, luminoso y rejuvenecido al rostro.
Gracias a su efecto descongestivo y drenante, es ideal para mejorar el aspecto de ojeras pigmentadas y bolsas de retención linfática.
Contribuye a unificar el tono, suavizar imperfecciones, reducir poros dilatados y mejorar el aspecto general del cutis.
Favorece el tensado de la piel en rostro, cuello, abdomen, brazos, glúteos y muslos, sin dolor ni recuperación.
Desde la primera sesión se percibe una mejora en la tonicidad y elasticidad, con un “efecto flash” que continúa evolucionando durante los días siguientes.
La diatermia, al activar la circulación y mejorar el metabolismo del tejido adiposo, ayuda a reducir la apariencia de la celulitis y mejorar la textura de la piel de naranja.
Favorece la regeneración de tejidos dañados, disminuyendo la visibilidad de cicatrices, estrías o marcas post acné.
En su modalidad resistiva, la diatermia también es usada para tratamientos más profundos, especialmente en personas que han perdido tonicidad muscular o presentan contracturas o tensiones faciales/corporales.
La diatermia se puede aplicar prácticamente en cualquier parte del cuerpo, gracias a su seguridad y adaptabilidad:
Una sesión de diatermia estética suele ser relajante y placentera, ya que el calor profundo produce una sensación reconfortante y terapéutica.
Una sesión suele durar entre 30 y 60 minutos, dependiendo del área tratada.
Aunque se puede percibir un efecto tensor desde la primera sesión, lo ideal es realizar un tratamiento progresivo y personalizado, ya que los efectos de regeneración profunda son acumulativos.
La frecuencia y el número de sesiones variarán según edad, estado de la piel, zona a tratar y objetivo estético.
La diatermia está indicada para personas que:
Aunque se trata de una técnica segura, existen ciertas contraindicaciones:
Un diagnóstico profesional previo es esencial para determinar si el tratamiento es adecuado para ti.
Tratamiento | Invasivo | Tiempo de recuperación | Resultados visibles | Duración del efecto | Aplicaciones |
Diatermia | No | Ninguno | Desde la primera sesión | Progresivos y acumulativos | Facial y corporal |
HIFU | No | Ninguno | 2-4 semanas después | Hasta 12 meses | Reafirmación profunda |
Radiofrecuencia básica | No | Ninguno | Moderados | Menos duraderos | Facial o corporal |
Ácido hialurónico | Sí | Leve (hinchazón) | Inmediatos | 6-9 meses | Volumen facial |
Lifting quirúrgico | Sí | Semanas | Inmediatos | 5-10 años | Facial profundo |
En nuestro centro de estética avanzada, trabajamos con diatermia de última generación, con protocolos personalizados, adaptados a cada tipo de piel, edad y necesidad estética. Combinamos la diatermia con técnicas manuales, drenaje, activos dermocosméticos y aparatología complementaria para potenciar sus efectos y ofrecer resultados visibles y duraderos.
Nuestro equipo está altamente formado y cuenta con una filosofía de trabajo basada en la regeneración consciente, el cuidado progresivo y el respeto por la biología de tu piel.
La Diatermia es una herramienta regenerativa, profunda y versátil, capaz de mejorar la calidad de la piel, reafirmar tejidos, reducir la flacidez y revitalizar el rostro y el cuerpo sin necesidad de cirugía.
Si buscas un método eficaz, seguro, agradable y científicamente respaldado para rejuvenecer tu piel desde el interior, la diatermia es una excelente elección.
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